Cómo hacer que tu newsletter funcione
Un newsletter o boletín informativo genera oportunidades de venta, te ayuda a comunicarte directamente con tus clientes (actuales y potenciales) y, además, si lo haces bien, tiene un gran potencial de fidelización. Sin embargo enviar un newsletter no implica que este vaya a ser leído.
Para lograr que te lean aquí te damos 8 consejos:
Consejo nº 1. Envía tu newsletter solo a tus suscriptores
Un newsletter se envía a quien lo haya solicitado. Esta medida es muy eficaz para construir una base de datos con personas que tienen interés real por la marca, están predispuestas a recibir contenidos y voluntariamente han aceptado recibirlos. Además, recomendamos que, siempre que sea posible, hagan Opt-in doble antes de recibir ninguna comunicación.
Recuerda que tus suscriptores son también potenciales clientes a los que puedes aportar gran valor. Por eso el ratio de conversión a cliente también es considerablemente más alto que el de otros canales de comunicación como por ejemplo las redes sociales.
Consejo nº 2. Segmenta tus envíos.
Conocer los motivos por los que se suscribieron, así como sus características, necesidades e intereses, te ayudará a enviar información personalizada y de interés para cada tipo de usuario al que te quieras dirigir. Este simple gesto humaniza a la marca y la acerca mucho más a las personas.
Consejo nº 3. Haz el texto breve.
Tu objetivo es dirigir a tu audiencia a otro sitio para que allí consuman todo el contenido. No que se pasen todo el día leyendo tu correo. Recuerda que nadie invierte mucho tiempo en leer emails, más bien se escanean. Así que se conciso y claro.
Tu newsletter debe contener:
- TÍTULO: Elige un título llamativo, breve y directo. Ya te indicamos cómo en el post Titulares ganadores en 7 pasos.
- CONTENIDO:
- Uno de los principales problemas de los newsletters es que muchas veces incluyen tantas cosas que parecen desordenados y sin un enfoque claro. Nosotros te recomendamos centrarte en un solo tema.
- Otro error es que muchas veces son excesivamente promocionales. Y un boletín lleno de promociones podría echar para atrás a tus suscriptores. Por eso lo ideal es que tu newsletter sea un 90% educativo y solo un 10% promocional. Para ejemplo, esta situación: “Me gusta la decoración y este sitio web de decoración me parece lo más. Así que me suscribí. Pero ahora recibo 2 o 3 mensajes al día para comprar, comprar y comprar. Cuando me llega otro correo, me dan ganas de gritar. Sin embargo, si me enviaran las últimas tendencias en decoración, o cómo combinar ciertos estilos, tendría más ganas de comprar en su página o, al menos, de abrir sus mensajes”. Así que, a no ser que debas comunicar una novedad muy importante sobre tu producto, servicio o empresa, céntrate en enviar a tus suscriptores información educativa, relevante y oportuna.
- Muchas marcas también aprovechan contenidos ya existentes en sus blogs y hacen resúmenes breves e incluyen enlaces a esos artículos en sus newsletters.
- REVISA LA ORTOGRAFÍA: Siempre es necesario revisar y corregir el texto a conciencia.
Consejo nº 4. Haz el diseño minimalista.
- PRESENTACIÓN CUIDADA: Cuanto más sencillo, simple y directo, mejor.
- Diséñalo para que funcione en distintos dispositivos.
- Sigue una estructura o plantilla definida.
- Revisa el tamaño de las imágenes, ya que muchos gestores las bloquean. Por este mismo motivo, asegúrate de que las imágenes tengan texto “Alt” (el texto alternativo que aparece cuando las imágenes no logran cargarse).
- NO OLVIDES:
- Identificar el mail con la cabecera y logo de tu empresa.
- Incluir el link “ver versión web”, botones de redes sociales, los datos de contacto en el footer y botón para que quien lo desee pueda darse de baja.
Consejo nº 5. Elige una Call to action principal.
Recuerda que tu newsletter tiene un objetivo, y aunque puede contener otras llamadas complementarias, siempre tiene que haber una llamada a la acción principal. Déjales bien claro a los suscriptores que es lo que quieres que hagan.
Consejo nº 6. Sé creativo con el asunto.
El asunto es lo primero que verán tus lectores y lo que decidirá si abren o no tu newsletter. Tiene que ser creativo, interesante y convincente. Además debe generar expectativas y/o sensación de urgencia y evitar palabras que habitualmente se consideran spam, como por ejemplo: “gratis”.
Consejo nº 7. Decide la periodicidad de envío.
Sé específico con tus suscriptores. Cuéntales qué van a recibir y también con qué frecuencia. Aclarar esta información de antemano te ayudará a reducir el número de bajas.
Recuerda que tu newsletter debe tener una periodicidad fija que no te puedes saltar por nada del mundo. Esta periodicidad puede ser diaria, semanal, mensual, trimestral, etc. Al generar una comunicación frecuente con tus suscriptores de correo electrónico, estás mejorando el reconocimiento y los sentimientos positivos que estos tienen de tu marca.
Consejo nº 8. Mide.
¡Esto es muy importante! Necesitas conocer lo que funciona y lo que no para tu audiencia en particular, por lo tanto no temas realizar algunas pruebas o test para ver qué es lo que prefieren tus usuarios. ¡Prueba, prueba y prueba! Siempre puedes realizar cambios en el asunto, el contenido, la call to action, o incluso no incluir imágenes para optimizar tu newsletter y que se adapte mejor a los gustos de tu audiencia.
Llegados a este punto, ya te habrás dado cuenta de que enviar un buen newsletter no es tan fácil como parece. Debes optimizar el texto, crear llamadas a la acción efectivas, diseñar para que funcione en distintos dispositivos, evitar el spam y crear asuntos interesantes. ¡Ah! y no te olvides de cumplir la legislación y de verificarlo todo antes de darle a enviar porque aquí no hay vuelta atrás. Si necesitas ayuda ponte en contacto con Arrontes y Barrera.
